Los antiguos talleres del Ferrocarril de Antioquia, ubicados en la ciudad de Bello, y construidos a principios del siglo XX, fueron abandonados completamente durante más de 40 de años luego de la quiebra económica de la compañía, pero aún son motivo de orgullo de la tradición popular. Salvados de su demolición solo por dificultades burocráticas, logran sobrevivir hasta el año 2011 en que finalmente se abre un concurso de arquitectura, organizado por la sociedad colombiana de arquitectos (SCA) y el Área Metropolitana del Valle de Aburra (AMVA) para el reciclaje de las antiguas edificaciones destinándolas a un proyecto cultural pionero en la ciudad, el parque de Artes y Oficios. Dicho concurso fue ganado por las oficinas Taller Síntesis, Cauce arquitectura del paisaje, Arq. Juan David Hoyos y Matiz arquitectura para hacerlo realidad.

El proyecto del Parque de artes y oficios (PAO)es una intervención en la memoria de la ciudad en la que se supera la simple nostalgia, la simple fachada. Una memoria que se hace activa en el presente a través de dos estrategias, una urbana y una espacial, la primera de opera por medio de la valoración y activación de los rieles, huellas del movimiento de la máquina. La segunda lo hace mediante la potenciación de la gran calidad espacial de la sección de las naves industriales.

Estrategia urbana

Los Talleres del ferrocarril tienen un aproximado de 5800 metros lineales de rieles en sus instalaciones. Creemos en la importancia de rescatar y reciclar estos rieles pues es en ellos donde se encuentra plasmada la huella urbana de otro tiempo y otra velocidad, son ellos los trazos del patrimonio en la tierra. Como estrategia los reactivamos con una serie de nuevas actividades, usos y dispositivos a nivel de espacio público que usan el sistema férreo para su funcionamiento y que dinamizan y conectan, como ya hicieron en otro momento histórico, las instalaciones del nuevo Parque de Artes y Oficios.

Estrategia proyectual

Buscamos la valoración espacial de la nave industrial y la conservación de esta incluso luego de la adición de un programa nuevo y altamente complejo, que incluye entre otros un teatro para 900 personas, una escuela de música, una escuela de oficios y la alcaldía del municipio de Bello. Es así como si bien a la edificación se le agregan los distintos usos solicitados, estos se ubican de tal modo que ocupan únicamente el 50% de la planta del edificio existente a reciclar conservando el restante 50% libre.

Los límites del nuevo programa son diluidos mediante el reflejo, estrategia que nos permite completar nuevamente la sección original al reflejarse la mitad libre de la edificación original en las superficies de los volúmenes internos que contienen el nuevo programa, haciendo simultáneos de este modo dos tiempos históricos diferentes.

Actualmente, y luego de más de 12 años de la realización del concurso adelantado por la SCA y el AMVA se encuentra en ejecución la fase 1 de la intervención del PAO, que consiste en la ejecución del Teatro y la escuela de música.


Fuente: Taller Síntesis, Cauce arquitectura del paisaje, Arq. Juan David Hoyos y Matiz arquitectura

Fotografías: Farhid Maya