ARQUITECTURA AL SERVICIO DE LAS COMPRAS

El éxito de un centro comercial está determinado por el espacio y la oferta de entretenimiento. Más allá de almacenes, los compradores hoy buscan experiencias. Casinos, neuromárketing y áreas comunes que se renuevan, lo que está de moda.

La Sociedad Colombiana de Arquitectos realizó en Bogotá el Encuentro Nacional de Arquitectura de Centros Comerciales, donde expertos de todo el país tuvieron la oportunidad de compartir lo que está pasando en el sector y discutir las tendencias que lo definen a nivel mundial.

Juan Felipe Cadavid, uno de los arquitectos ponentes, asegura que el reto es lograr que millones de personas puedan quedar cautivadas por un solo espacio en el que deben convivir incontables elementos, productos y servicios muy heterogéneos.

La facilidad para recolectar y analizar cantidades masivas de datos, así como la globalización, han facilitado que en cualquier parte del mundo se puedan conocer cuales son esos estilos y actividades que realmente les gustan a la gente, lo que está de moda.

Las principales conclusiones, explica Cadavid, es que el sector se debe mantener a la vanguardia. Espacios de entretenimiento poco convencionales, materiales moldeables y estructuras que pueden ser modificadas con rapidez llevan la batuta en este momento.

El auge de los casinos

La búsqueda de espacios de diversión diferentes a los cinemas y a las salas de videojuegos, ha llevado a los centros comerciales a abrir sus puertas a los casinos, una tendencia que, según la arquitecta Juliana Urriago, logra atraer a la población con un poder adquisitivo más alto, principalmente gente mayor para quienes se vuelven “una especie de club”.

Los casinos han tenido que adaptarse al espíritu del centro comercial, transformándose en lugares más abiertos, con una fachada e iluminación que ofrecen más visibilidad y ayuda a generar un ambiente más familiar. La idea es quitar ese estigma de que son sitios donde pasan cosas malas.

Neuromárketing en las tiendas

Al interior de los locales de un centro comercial, la tendencia es el neuromarketing. De acuerdo con Juan Fernando Molina, experto en arquitectura comercial, las tiendas deben preocuparse por activar todos los sentidos de sus compradores para generar una experiencia de marca más que una de compra.

Para llegar a esto, primero hay que tener muy claro cuál es la identidad de la marca, la cual debe verse reflejada en la iluminación, los materiales y decoraciones en las paredes, pisos y techos e, incluso, en la vestimenta de los trabajadores.

Lo primordial, señala Molina, es no olvidarse de que la forma en que llegan los clientes al establecimiento es lo más importante. Por eso son claves instalaciones acordes con el estilo de la marca en las áreas sociales del centro comercial, las vitrinas y fachadas, en las que se imponen las diagonales y el uso de materiales como maderas y láminas microperforadas o troqueladas. Los materiales ecológicos y las luces LED son la tendencia.

Renovación constante

Cadavid, quien estuvo detrás de la renovación de Unicentro de Cali, explica que los centros comerciales deben evolucionar y lucir siempre novedosos. La solución más común es la de la arquitectura efímera, que consiste en construir escenografías flexibles, que pueden cambiarse rápidamente.

Funciona tanto en los colores y materiales de las fachadas, como en los detalles al interior. Por ejemplo, pequeños locales tipo caseta, instalaciones artísticas en los pasillos, y decoraciones en las plazoletas que cambian dependiendo de las temporadas y fechas especiales. La luz se ha vuelto determinante, pues los ángulos y el color de la misma ayudan a que los objetos se vean diferentes, dando ese toque de novedad que se requiere.

Materiales de última generación

El mercado de los materiales de contrucción se mantiene en constante innovación, generando que quienes construyen megaestructuras como centros comerciales tengan toda una gama de opciones para elegir con qué edificar.

La materia prima predilecta de los arquitectos en el mundo es una placa de cemento Portland, recubierto por maya de fibra de vidrio, llamada Aquapanel. A diferencia del fibrocemento, que es lo más usado en Colombia, no tiene celulosa dentro de sus componentes por lo que no hay necesidad de sellarla cuando se usa a la interperie.

La facilidad de su uso, la robustez con la que cuenta y la estabilidad climática que proporciona ha hecho que este material sea usado en los principales centros comerciales de Israel, Suecia, Grecia, Dinamarca y Chile; incluso el estadio Allianz Arena de Múnich fue construido con estos paneles.

Fuente: El Espectador

Arquitectura bioclimática para fomentar el ahorro en los hogares

Siguiendo costumbres indígenas, el sector busca aprovechar y potenciar las características del entorno para diseñar nuevos proyectos. Reducción de costos y espacios más ecológicos, los beneficios.

A principios de este año las redes sociales dieron a conocer un barrio argentino que va a ahorrar hasta el 30 % de sus costos de energía. El proyecto, que es más un piloto, ubicado en la ciudad de San Luis —a ocho horas de Buenos Aires—, consta de 35 casas y se basa en un concepto que muchos tachan de moda o tendencia, pero que, según los expertos, es el uso correcto de los principios básicos de la arquitectura: la bioclimática.

Al menos ese es el punto de vista de Howard Villarreal, arquitecto especialista en desarrollo sostenible, quien agrega que se trata de “hacer arquitectura como debimos hacerla siempre”. Es decir, basada en el aprovechamiento y respeto de las bondades del entorno como la brisa y el sol. Flavio Romero, presidente de la Sociedad de Arquitectos de Colombia, señala que al diseñar una construcción de esta manera se “genera un hábitat saludable y agradable sin desperdiciar muchos recursos”.

Así, por ejemplo, se pueden aplicar soluciones como construir una casa según la posición del sol para calentarla e iluminarla, o diseñar ventilaciones cruzadas para aprovechar las corrientes de aire de la zona y mantener una temperatura fresca en su interior. A esto, dice Romero, se suma el uso de materiales que potencian las características de la estructura. Se trata, principalmente, de cubiertas y paredes que pueden proporcionar aislamiento térmico y acústico, generando una experiencia de frescura sin importar la temperatura exterior.

Algunos ejemplos son los muros tipo sánduche, que tienen una capa central con frescasa, poliuretano o icopor, que contribuyen a retener un poco el calor y el sonido. En cuanto a los techos, la tendencia son las cubiertas verdes, que los forran con vegetación y protegen con impermeabilizantes y gravilla para retener el calor. Asimismo, están los concretos permeables, que permiten el ingreso de agua al subsuelo y hacer más frías las superficies, o los gramoquines, que dejan espacio para que el césped pueda sobresalir. En el caso de las ventanas, se destacan los vidrios con cámara de aire en el medio o las láminas que protegen de la radiación solar. Si lo que se busca es combatir el clima frío, materiales como los adoquines son perfectos, mientras que para el calor se recomiendan tablones.

De esta manera se evita el uso de soluciones como calefacciones y aires acondicionados, que no son tan recomendadas por su consumo de energía. También están teniendo bastante acogida duchas, sanitarios y lavamanos ahorradores o paneles solares, todos instalados en las 35 casas de San Luis. Dichos hogares están ubicados de norte a sur, pues los paneles no son los únicos que aprovechan la energía del sol, también lo hacen los equipos termosolares que calientan el agua. Las estructuras, además, usan luces led y un sistema de forestación endémica para ofrecer sombra en verano e invierno. Villarreal señala que esta forma de edificar es más antigua de lo que se cree y que todavía se pueden observar ejemplos en las construcciones de los pueblos indígenas, “que son muy respetuosos de la naturaleza”, así como en el interior de la región Caribe.

Un ejemplo moderno es el Bio-Hotel Organic Suites, en Bogotá, que genera buena parte de la energía que usa, tiene sistemas para reciclar sus aguas residuales e incluso cuenta con la certificación internacional LEED de Liderazgo en el Diseño de Energía y Medioambiente. Por otra parte, está el proyecto de adaptación del barrio Boston de Cartagena, con el que se espera hacer mejoras para mitigar y aprovechar las inundaciones que son comunes en la zona.

Aunque Colombia está avanzando en este frente, Romero asegura que falta mucho camino por recorrer, sobre todo en materiales accesibles, pues a pesar de que existe una amplia variedad, siguen siendo muy costosos para el público general. También se necesita un cambio de filosofía. “Factores como la explosión inmobiliaria provocaron que nos olvidáramos de estos principios tan importantes”, concluye Villarreal.

Fuente: El Espectador

El EQUIPO MAZZANTI invitado a la 15a Exposición Internacional de Arquitectura

EL EQUIPO MAZZANTI invited to the 15th International Architecture Exhibition – La Biennale di Venezia curated by Alejandro Aravena
El EQUIPO MAZZANTI invitado a la 15a Exposición Internacional de Arquitectura – La Biennale di Venezia curada por Alejandro Aravena


La Bienal de Arquitectura de Venecia 2016 es el evento más importante en el mundo de la arquitectura, donde se reúnen países y arquitectos. Este año el curador es Alejandro Aravena premio Pritzker 2016. El Equipo Mazzanti ha sido invitado para ser parte del pabellón del curador «Reporting from the front» ubicado en el Giardini junto con los colombianos Simón Vélez y Grupo EPM. Los otros invitados a este pabellón son David Chipperfield, Atelier Bow-Wow, Al Borde, Atelier Peter Zumthor & Partner, Pezo von Ellrichshausen y OMA entre otros. «Reportando desde el frente» busca mostrar las batallas que han librado distintos arquitectos en sus proyectos y como las han ganado para tranformar la calidad de vida de la sociedad.

Trustics es la propuesta de El Equipo Mazzanti bajo la premisa de la transformación de tres ciudades colombianas (Medellín, Bogotá y Santa Marta) a través de la construcción de redes de confianza y arquitectura. Los proyectos sociales del estudio al igual que está propuesta han sido tejidos con la colaboración de distintos profesionales, técnicos y la comunidad. Los proyectos no solo cumplieron su función de educación y cultura sino que su planeación llevaba consigo una propuesta de transformación social a través de lazos de confianza entre el arquitecto, la comunidad y el Estado. Trustics un proyecto de 36 m2, 7 meses, 131 personas y 9 ciudades estará presente en la muestra del 28 de Mayo al 27 de Noviembre de 2016.

Ver propuesta Trustics